El día (21-7-2000) que Ismael Beiro ganó "Gran Hermano" aprendí una cosa: todo el mundo puedo ver negro algo que tú ves blanco como la nieve.
Para mí Ismael era un traidor. A lo largo del concurso había traicionado y mentido, y (teoricamente) eso actos habían sido presenciados por una media de ocho millones de españoles (la primera final de "Gran Hermano" tuvo un share del 77%). Lo lógico, si todo el mundo había asistido a sus malas artes, como por ejemplo la conversación en la que había traicionado la confianza de sus presuntos amigos Silvia e Israel, hubiera sido que, como mínimo lo expulsasen en una de las ocasiones en los que todos fueron nominados (en la primera edición hubo pacto para que todos resultasen nominados cada semana y el público eligiese quien era el expulsado). Pero no. Ismael llegó a la final, y no sólo eso. Ismael Beiro ganó. Y todo el mundo se regocijó, incluso los traicionados Silvia e Israel.
En 2003, Ismael Beiro participó en "La isla de los famosos", de nuevo fue finalista y sólo ante la emisión de unos comentarios "fuera de cámara" en los que insultaba a un compañero de reality perdió ante la argentina Daniela Cardone.
Cada vez que veo algo con una claridad pristina y meridiana, como que "Ana y los siete" era una estupidez o que Schuster es el mejor entrenador posible para el Real Madrid recuerdo a Ismael Beiro y asumo que todo el mundo puede, ante los mismo hechos objetivos, opinar algo totalmente distinto.
Y esto es algo que mañana voy a tener muy presente, porque mañana probablemente lo que yo pienso vaya a ser corroborado por 9.999.999 de personas y aquello de lo que abominó vaya a ser respaldado por otras 9.999.999. Por eso sólo pongo velas al padrecito José Gregorio, patrono de las telenovelas, para que el honrado ciudadano de occidente que posiblemente acabe decidiendo como va a acabar el cuento no piense lo mismo que estos.
Para mí Ismael era un traidor. A lo largo del concurso había traicionado y mentido, y (teoricamente) eso actos habían sido presenciados por una media de ocho millones de españoles (la primera final de "Gran Hermano" tuvo un share del 77%). Lo lógico, si todo el mundo había asistido a sus malas artes, como por ejemplo la conversación en la que había traicionado la confianza de sus presuntos amigos Silvia e Israel, hubiera sido que, como mínimo lo expulsasen en una de las ocasiones en los que todos fueron nominados (en la primera edición hubo pacto para que todos resultasen nominados cada semana y el público eligiese quien era el expulsado). Pero no. Ismael llegó a la final, y no sólo eso. Ismael Beiro ganó. Y todo el mundo se regocijó, incluso los traicionados Silvia e Israel.
En 2003, Ismael Beiro participó en "La isla de los famosos", de nuevo fue finalista y sólo ante la emisión de unos comentarios "fuera de cámara" en los que insultaba a un compañero de reality perdió ante la argentina Daniela Cardone.
Cada vez que veo algo con una claridad pristina y meridiana, como que "Ana y los siete" era una estupidez o que Schuster es el mejor entrenador posible para el Real Madrid recuerdo a Ismael Beiro y asumo que todo el mundo puede, ante los mismo hechos objetivos, opinar algo totalmente distinto.
Y esto es algo que mañana voy a tener muy presente, porque mañana probablemente lo que yo pienso vaya a ser corroborado por 9.999.999 de personas y aquello de lo que abominó vaya a ser respaldado por otras 9.999.999. Por eso sólo pongo velas al padrecito José Gregorio, patrono de las telenovelas, para que el honrado ciudadano de occidente que posiblemente acabe decidiendo como va a acabar el cuento no piense lo mismo que estos.
7 comentarios:
Llevo toda la noche discutiendo de política cuando se supone q es un tema que odio,pero es que a mí también me pasa eso de que hay veces que creo firmemente que algo es negro cuando todas las demás personas lo ven blanco. Y claro hay cosas que no entiendo; como, por ejemplo, por qué estaba mal que Franco adoctrinara a las juventudes españolas, pero está muy bien que Zapatero adoctrine a la juventud actual a través de la asignatura de Educación a la Ciudadanía (¿es que las demás asignaturas no son suficientes para educar a los ciudadanos españoles y es necesario utilizar una asignatura específica para dejar bien claro que la homosexualidad no sólo es algo normal sino deseable, que el aborto no sólo está despenalizado en algunos supuestos tasados sino que debería ser algo totalmente legal porque el derecho de la mujer a disponer de su propio cuerpo tiene que primar en todo caso sobre el derecho a la vida del nasciturus o que los hombres y las mujeres somos iguales,pero que como la mujer no es capaz de conseguir las mismas cosas que los hombres es necesaria la discriminación positiva?).
Afortunadamente, pase lo que pase mañana, tengo la tranquilidad de que nadie podrá privarme del derecho de seguir pensando que lo blanco es negro; porque ni siquiera los dictadores han sido capaces de acabar con la libertad de pensamiento, aunque piensen que esto es posible suprimiendo la libertad de expresión (hay gente que es así de simple).
Ming, eres un malvado muy peculiar, ¿te parece que los del foro de la familia tienen rabo y cuernos? ¿te crees mejor persona que ellos porque votas a otro partido?
Si.
Yo soy buena gente, votaré con el puo cerrado y las bragas limpias.
puo=puño
Yo también (al de arriba).
Pero mira, que estoy tan tan de acuerdo en todo todo todo (Ismael, Ana y los siete, Schuster y lo de hoy) que voy a dejar por escrito que si algún día me incapacitan te nombren mi representante legal para votaciones generales y de realities.
Vamos a cruzar los dedos.
A mí me gustaba Ismael Beiro, pero solo porque soy una grupi y me parecía mono. Una prueba más de lo vendido que puede ser el ser humano.
Y sí, claro, yo también me creo mejor que la mayoría. De hecho, el concepto de democracia está muy bien en la teoría pero en la práctica es una gilipollez. He dicho.
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